Con frecuencia cuando estamos en busca de trabajo una de las cosas que más nos cuesta es saber que llevaremos puesto. La imagen dice mucho de quienes somos, aun cuando no hemos pronunciado una sola palabra lo primero que habla de nosotros es nuestra apariencia.
Es por ello que vestirte adecuadamente, no necesariamente es de traje, pero si hay reglas básicas que puedes seguir:
Revisa siempre que tu ropa esté limpia y cuidada.
Utiliza colores que proyecten mayor jerarquía y seguridad como el azul marino o gris oxford.
Lleva un calzado cómodo pero no sandalias o chanclas.
Evita la ropa rota o rasgada.
Cuida usar la ropa demasiado holgada y/o demasiado apretada.
“Recuerda que nunca hay una segunda oportunidad para dar una primera buena impresión”